sábado, junio 10, 2006

Cómo prodríamos pensar

Copio del encabezado del texto que se encuentra aquí


Esta versión en español fue publicada en marzo de 2001, en el número 239 de la Revista de Occidente, dedicado a “El saber en el universo digital” y preparado por José Antonio Millán. Se publica ahora, cinco años después, por primera vez en Internet (en inglés está disponible desde 1994). Viene a cubrir la sorprendente ausencia en la Red de la traducción de un texto clásico, considerado por muchos como un precursor de la idea que, casi medio siglo después, dio lugar a la Web. Escrito en un momento muy significativo, a finales de la Segunda Guerra Mundial, cuando la alianza de la ciencia y el horror había alcanzado cotas antes nunca vistas (de la experimentación médica nazi a la bomba atómica), un científico, Vannevar Bush, plantea su misión en un mundo posbélico y, entre tantos sueños posibles, escoge uno: una máquina que ponga cualquier publicación del mundo encima del escritorio. ¿Cuál era la finalidad del sueño de Bush? Sencillamente: la creación intelectual. Su utopía contempla, sí, el acceso universal, pero al servicio de algo: el título de su manifiesto no fue: “Cómo conseguiríamos llegar a todo” sino “Cómo podríamos pensar” (As We May Think). Pues bien, la World Wide Web ha realizado el sueño de Bush hasta un extremo que ni siquiera él se había atrevido a imaginar.